Clase magistral de Raúl López
Raúl López impartió una clase magistral tanto a nivel de acierto como en la dirección y guió a su equipo hacia la victoria sobre un inoperante CBValladolid. El equipo local deambuló por la cancha totalmente perdido, tanto en ataque como en defensa. Gran acierto desde el triple de los bilbaínos (13/26) quienes también doblaron en rebotes a los vallisoletanos (20-41). [Estadísticas]
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Clase magistral de Raúl López
Jorge Álvarez
Fotos: Marcos Sánchez González
2.diciembre.2013
Raúl penetra, … Fuente de foto: Fiebrebaloncesto.com / Marcos Sánchez González
Cuando restaban 4 minutos para el final del encuentro, el público del Pisuerga comenzó a desfilar hacia la salida. Ni ganas de protestar les quedaba. Sólo un deseo irremediable de huir del pobre espectáculo que estaba dando su equipo. Un equipo sin rumbo ni concierto, perdido en mil cambios, que parece que tiene voluntad pero le falta mucha calidad. Y si ese cóctel no se ordena un poco desde el banquillo, el resultado es éste: 57 puntos, pobres porcentajes (4/24 en triples), sin rebote y sin esquema de juego. Lo extraño es que el Bilbao Basket no se llevara mayor renta del Pisuerga. Bueno, se llevó la que quiso Raúl López.
Raúl tira, Raúl asiste y Raúl hace lo que quiere con este Valladolid con defensa nula. Fuente de foto: Fiebrebaloncesto.com / Marcos Sánchez González
El primer cuarto fue un despropósito por ambos bandos. Los 3 primeros ataques del cuadro local terminaron en 2 pases al público y uno al árbitro. Casas había salido con un quinteto extraño, con Iván Martínez de titular y unos emparejamientos defensivos sorprendentes. Iván sobre Raúl López, Rowe sobre Pilepic, Suka (1,92) sobre Hervelle y Omari (2,05) sobre Mumbrú. Si bien este último emparejamiento resultó y Mumbrú se quedó en tan solo 1 punto al final del cuarto, fue más bien víctima de los típicos errores del alero ante canastas fáciles más que a la gran defensa de Omari. En los otros casos, los atacantes fueron muy superiores a los defensores, en especial Hervelle y Pilepic, quienes pusieron en ventaja a su equipo al final del primer cuarto (11-16) sin hacer un gran baloncesto.
En esto del baloncesto, además de saberse las reglas y dominar la técnica, ganan los listos. Mumbrú se llevó dos tapones de Omari, pero a pesar de ello, entre él, Germán, Hervelle y Raúl (los más veteranos), hicieron lo que quisieron con este Valladolid sin estilo, ni claridad de ideas. Fuente de foto: Fiebrebaloncesto.com / Marcos Sánchez González
En el segundo cuarto, comenzó la clase de Raúl López. Con 12 puntos al final del mismo, hizo lo que le dio la gana. El CBValladolid no defendía y el base siempre encontraba el pase extra o bien él mismo se encargaba de anotar. Sinanovic veía pasar a su lado a Germán Gabriel, más rápido que el bosnio pese a sus maltrechas rodillas. Casas seguía con los inventos defensivos y ahora era el alero recién incorporado al equipo Viney (2,02) quien cubría a Markota (2,10). Haritopoulos estaba desaparecido, porque pese a luchar cada rebote, no le llegaba ningún balón abajo para poder definir. Y es que Rowe juega para él solo. Se olvida de que hay equipo. Por ello Casas lo intentó con Vilhjalmsson de base, pero el islandés se perdió en botar y botar sin saber muy bien qué hacer con el balón. En los dos últimos minutos, por fin el Bilbao Basket rompió el partido y se fue al descanso con una ventaja que ya se adivinaba suficiente para no sufrir en la segunda parte (22-39).
Dos formas distintas de ser pivot: tener altura y no aprovecharla (Sinanovic), tener lo justo y dar mucho más (Hervelle). Fuente de foto: Fiebrebaloncesto.com / Marcos Sánchez González
Tras el descanso, mejoró la producción ofensiva del equipo local, gracias a que por fin llegaron balones a Haritopoulos y a la buena mano de Viney. En cambio, el equipo seguía echando en falta los puntos de Andusic, muy bien cubierto por Grimau. El Bilbao Basket se limitó a controlar el choque de la mano de Raúl López y de nuevo los triples de Pilepic y Bertans proporcionaban un cómodo colchón de casi 20puntos, que les permitía a los vascos llegar al último cuarto sin apuros (42-61).
Nuestro griego preferido», como siempre, en la lucha ataque-defensa, demasiado solo (Haritopoulos). Fuente de foto: Fiebrebaloncesto.com / Marcos Sánchez González
El último cuarto sobró. Y así lo entendió gran parte del público que comenzó a desfilar cuando aún restaban 4 minutos para el final de encuentro. Lo aprovechó Omari, para maquillar sus estadísticas y mostrar que además de ser un gran saltarían también tiene capacidad para anotar. También lo aprovechó Pueyo para dar salida a todo el banquillo, lo que permitió a Vrkic unirse al festival de triples de su equipo. Al final, 57-81 para un Bilbao Basket que muestra síntomas de mejora después de un pobre inicio de liga.
Por parte local, el mejor resumen es el que hacían los propios aficionados: “Debería haber desaparecido el club y comenzar de cero, con gente de la casa. Esto es penoso”. Yo no puedo añadir nada más.
Los dos aleros altos de Valladolid: Omari bien en ataque y peor en el juego de equipo (como todo el Pucela), Viney es el nuevo fichaje y apunta buenas maneras (a ver si esto empieza a ser un equipo:(). Fuente de foto: Fiebrebaloncesto.com / Marcos Sánchez González
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