Humo consistente: el ilusionante […]

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5 victorias consecutivas, líderes del Este. El inicio de curso de los Knickerbockers tiene patas arriba a un Madison poco acostumbrado arranques tan fulgurantes. Con todo, incluso el más optimista seguidor de la Gran Manzana tiene sus reservas, acostumbrado como está a la ración anual de humo que su amado equipo suele venderle los primeros meses de curso. Rompamos una lanza en favor de los Bockers, calificando ese humo como consistente esta vez y esperando que no se disipe a finales de invierno-principios de primavera. La realidad siempre estará a tiempo de soltarnos el prometido sopapo anual…

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Humo consistente: el ilusionante arranque de los Knicks

Juan Luis Barbero

18.octubre.2012

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Espíritu de equipo en los nuevos Knicks. Fuente de foto: jasonkidd.com


5 triunfos de una tacada, cimentados desde un excelente trabajo defensivo. Por primera vez en bastante tiempo los Knicks parecen saber a lo que juegan, y han sorprendido a la liga con un juego coral (5 jugadores promediando 9 o más puntos por partido) tanto en ataque como a la hora de proteger su aro. En fase ofensiva, la presencia de dos bases en el quinteto ayuda sobremanera a la hora de mejorar la fluidez del balón, buscando las mejores posiciones de tiro. Evidentemente, solistas del nivel de Carmelo Anthony y J.R Smith (brutal inicio del sexto-hombre, que está anotando 18 puntos con unos porcentajes de acierto irreales) tienen permiso para saltarse de vez en cuando los sistemas, pero también para ellos es muy beneficioso tener a Felton y a Kidd distribuyendo el juego (con 15 minutos por partido también para Pablo Prigioni, el rookie de 36 primaveras).


En defensa la insistencia de coach Woodson ha surtido efecto, y la mejoría que se vislumbraba ya el año pasado se ha consolidado en esta nueva campaña. Además del liderazgo de Chandler en este aspecto (que va más allá de sus números, intangibles los llaman), el grupo de veteranos de los Knicks (clave el papel de Kidd) ha logrado que Melo y Smith bajen el culo como nunca en sus carreras. Añadamos al cóctel la llegada de un importante jugador defensivo como Ronnie Brewer y obtendremos un grupo que muerde atrás, y que encaja únicamente 88 puntos hasta la fecha.

Y finalmente llegamos a la verdadera clave para el que escribe: el doble cambio (de mentalidad y de posición) de Carmelo Anthony. El inagotable talento anotador de Melo nunca ha estado en entredicho, eran su mentalidad y liderazgo los que siempre estuvieron bajo sospecha. El Anthony 2012/2013 parece un jugador nuevo en ambos aspectos, con una energía desbordada a la hora de defender. Un caudillo fanático para la tropa, que celebra con pasión cada tapón o robo de balón mientras atormenta a los rivales con su velocidad y su suntuoso arsenal ofensivo, jugando cada vez más como falso power-forward.

Todo funciona como un reloj, y todos en la franquicia esperan que la vuelta a las canchas de Amare Stoudemire no altere tal equilibrio. Complicada la gestión futura de tal regreso para el entrenador Mike Woodson, que se verá prácticamente obligado a devolver a Melo al puesto de 3, y con ello a sacar a uno de los dos playmakers del quinteto inicial. Cosas del star-system.

Hasta que llegue ese momento sigamos disfrutando de los Knickerbockers, mientras susurros con promesas de nuevas joyas (para acompañar a los dos solitarios anillos de las vitrinas) recorren el mítico pabellón de la capital del mundo.

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