El «tercer laker»
Los Lakers ganaron anoche el séptimo y definitivo partido contra los Celtics (83-79). 16 anillos para los Lakers son muchos anillos (los Celtics no piensan los mismo). Phil Jackson tendrá que utilizar a partir de ahora sus cuatro extremidades para ponérselos todos, en la intimidad por supuesto. El profético factor ‘rebote’, el archiconocido factor ‘cancha’ y el inesperado factor ‘Jack Nicholson’ decidieron el partido.
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El «tercer laker»
Alejandro Echeverría Rey
Hace dos años se comentaba entre los más puros fans «pro» y «against» Lakers, que Pau Gasol era el mejor «tercer laker». Dos años después, ese título ha ido rotando entre algunos integrantes de la plantilla angelina, acompañando siempre a Kobe y a Pau como primero y segundo de la escuadra. Anoche fue Ron Artest el tercer laker, qué cosas. Phil Jackson nunca se imaginó que la faceta ofensiva de Ron tendría algo que ver con ganar otro anillo más.
Sasha Vujacic saciando la sed de Ron Artest, mientras piensa
«vaaaaaaaamos, bebe gañán». Fuente foto: nba.com
Ron Artest (por mucho que digan) aterrizó en los Lakers con un único objetivo: reforzar la raquítica defensa de los Lakers. Phil no sólo quería ganar un buen defensor, también quería quitarse uno en contra dado que fue Ron, militando en los Rockets, el que le hizo la vida imposible a Kobe hace un año en las semis de conferencia. Aunque casi dan la campanada forzando el séptimo partido, terminaron perdiendo sin remedio (sin Yao Ming a partir del cuarto partido, todo sea dicho) con un patético 89-70 en el Staples Center (con un partidazo memorable de Gasol, 21 puntos y 18 rebotes, todo sea dicho).
Antes del partido de anoche, los aficionados de los Lakers afirmaban confiados que Boston no volvería a ganar nunca más en «su» casa… y así fue. Bryant y Gasol se pusieron la bata de cuadros y las zapatillas con garras (esas de andar por casa y que suena un rugido de oso con cada pisada) otra vez y dieron un auténtico recital. Mientras tanto, «Doc» Rivers animaba a sus jugadores diciendo: «Si hacemos nuestro juego da igual dónde jugemos».
Y es que las polémicas palabras de aliento de Phil a sus jugadores en un tiempo muerto del quinto partido (sobre la facilidad de los Celtics para perder en el último cuarto), se hicieron realidad esta vez. Después de una ventaja inicial abultada (23-14) de Boston, se llegó al último cuarto con sólo 4 puntos de diferencia (57-53) y los verdes no supieron/quisieron/pudieron mantenerla hasta el final. Mientras tanto los Lakers, puntito a puntito (metieron 16 tiros libres en el último cuarto), dieron la vuelta al marcador y contrarrestaron los tres triples (Wallace, Allen y Rondo) de los Celtics en el último minuto y medio.
Sin duda alguna, el rebote volvió a ser decisivo como ya había profetizado Kevin McHale después del sexto partido. Y ahí estuvo Gasol liderando la tabla con 18. «Doc» Rivers tuvo tiempo de sobra entre el sexto y séptimo partido para trazar otra estrategia defensiva enfocada a coger rebotes más fáciles necesitando menos altura. Pero la cosa se quedó en cigoto. En cualquier caso, el tercer factor decisivo fue sin duda Jack Nicholson, que protagoniza nuestra imagen del partido.
Con el marcador 23-23 (se rumorea que es el número favorito del actor) Allen intenta salvar un balón que vuela lejos y aterriza destrás de nuestro famoso (sentado siempre en primerísima fila). Kevin Garnett se tira como un portaaviones para salvarlo y pasa rozando a Jack que le recibe con una llave de Kung Fu y los ojos cerrados (seguro que los tiene cerrados). Ninguno de los dos sufrió daños graves, pero todo indica a que Jack gafó a los verdes justo en ese momento. La buena noticia es que el joven de la gorra, calada a lo marinero, desaparece de la imagen arrollado por Garnett y no se le vuelve a ver.
En el siguiente video resumen (que veremos completo sin que sirva de precedente, sólo para despedir las finales) están algunas de las jugadas a cámara lenta más interesantes del partido (principalmente el inteligente canastón de Gasol frente a Garnett). Si no entiendes ni pijo de inglés no pasa nada (que no me oigan en los cursos de inglés), las imágenes hablan por sí solas. De todas formas Pau, que ha pensado en eso, dice algo a mitad del video que sí entendemos todos. Ojo con Phil Jackson motivando inteligentemente a los suyos, se te pueden poner los pelos de punta. Ojo con «Doc» Rivers gritando a los suyos: «confiad el uno en el otro», te puede recordar a ‘Gladiator’ y también te puede poner los pelos de punta. Ojo con el imitador de Hulk Hogan del principio, no noté nada especial en mis pelos pero se me escapó una buena carcajada. Disfrutadlo.
Resumiendo los puntos clave (con palabras de un entrenador de cualquier equipo de Infantil):
-«No se os ocurrirá aspirar a ganar nada con 13 rebotes menos que el equipo contrario ¿verdad?» (los Celtics lo hicieron en los dos últimos partidos que les hubieran dado el anillo).
-«¿Un 32.5% de acierto en tiro de campo? Menuda basssssssssssssssura, os vais a pasar haciendo ‘líneas’ hasta el lunes» (a los Lakers les han dado un anillo terminando así el partido decisivo).
– «Hoy has jugado bien pero llevas 20 partidos haciendo el pánfilo. Cuando vea que te lo tomas en serio te saco de titular» (MVP para Artest por tocar la flauta por casualidad en el momento adecuado).
Conclusión. Si hubieran ganado los Celtics la imagen de Kobe (por supuesto, olvídate del MVP de las finales) y la de los Lakers hubiera quedado profundamente dañada por una serie final tan mala. Sin embargo han ganado el anillo y todos esos «detallitos» se olvidarán pronto.
Menos mal que en cuanto crezcan un poco nuestros jugadores ‘infantiles’ van a copar/eclipsar la NBA, que alguno grande ya lo está haciendo. Ahora me refiero en concreto al maduro y agresivo Pau que ha sido, sin duda, el más regular y decisivo con diferencia. Para él va nuestro MVP de Fiebre.