Carlos Suárez hará historia en el Madrid

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Estadísticas en mano, Carlos Suárez es el jugador más valioso del baloncesto nacional en el arranque de esta temporada. El alero del Madrid es tan codiciado en el juego del Super Manager como lo son las fotos de Katy Perry en las carpetas de los adolescentes de nuestro tiempo. El secreto de su éxito en la transición entre el Estu y el Madrid descansa en sus fabulosas condiciones para este deporte, muchas horas de trabajo y un carácter cincelado con la motivación de quien quiere ser un poco mejor cada día. Rosa Vara de Rey traza un relato delicado de cómo ha sido el verano y la adaptación del alero internacional en la exigente dinámica de Ettore Messina. Por el camino, nos desvela cuál es la golosina favorita del jugador o su actual modo de transporte.

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Carlos Suárez hará historia en el Madrid

Rosa Vara de Rey

12.noviembre.2010

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Una vez más en este inicio de temporada, Carlos Suárez exhibió este jueves su talento frente al Brose-Basket, con 26 de valoración. Fuente de foto: realmadrid.com.

Escribir sobre el mejor jugador nacional de la Liga ACB siempre es un placer. Además es muy fácil porque puedes coger los números, aportar varios datos estadísticos, añadir los clubes y competiciones por las que ha pasado el susodicho y post terminado. Pero yo creo que ya me conocéis y que sabéis que a mí los números me gustan bien poquito. Sólo me fijo en los de la lotería (porque nunca abandono la esperanza de que me vaya a tocar) y los que valen algún título (y eso desde la ULEB del Madrid no lo he vuelto a catar).

Carlos Suárez ha demostrado a todo el mundo en poco más de un mes de competición que a veces abandonar es el camino fácil, pero que luchar por lo que uno quiere normalmente trae más recompensa. ‘El Chimpa’ ha pasado por uno de los peores veranos de su vida. Lo que pasa es que su deseo de vestir la camiseta del Real Madrid ha sido más fuerte que el miedo, la cobardía o la duda.

Me explico. Durante este verano ha habido momentos en los que el equipo blanco estuvo a punto de ‘rajarse’ en su fichaje, hubo momentos en los que Estudiantes se enrocó de esa manera que sólo saben enrocarse ellos y le dieron ganas de pasar de todo, cumplir su año de contrato y ya está. Pero no. Primero vino la renuncia pública al Barça, un gesto que le honra tratándose del mejor equipo de Europa; después el inicio de los entrenamientos con Estudiantes donde Oliver y Germán Gabriel le machacaban a bromas y todo esto sin su papá Jasen; luego la disputa de ese último amistoso frente al Khimki donde recuerdo que por la mañana, en el entrenamiento, no sabía si le iban a convocar o no; y finalmente su fichaje por el Real Madrid, el día más feliz de este 2010.

Muchos se preguntaban si iba a aguantar la presión. Me consta que estaba como un auténtico flan (de huevo o vainilla, el que cada uno prefiera) el día del partido frente al Estudiantes, pero se salió. Y a partir de ahí ha ido sumando una gran actuación tras otra. No le pesa la camiseta del Madrid, cosa que sí le ocurrió a estrellas consagradas como Papadopoulos o Massey en los últimos años.

Pero lo que más me alucina de él es que ahora vive en un mundo diferente y Carlos Suárez sigue sin tener el carnet de conducir y le tiene que acercar algún compañero a casa, sale del vestuario en chándal y comiéndose un ‘dulci-pica’ (para el que no lo sepa palo rojo de gominola relleno de azúcar blanco), pero sobre todo que sigue siendo una persona normal.

Messina no es una persona fácil en el trato cuando se pone el traje de entrenador. Pero el amor llega cuando llega y el entrenador italiano no ha podido reprimir el cariño que le ha cogido a Suárez en poco más de dos meses de competición. Me consta que al principio ‘el Chimpa’ alucinaba con sus broncas, que no sabía por donde cogerlas, que pensaba que ‘ni su padre, ni su abuelo’ le habían gritado así nunca, pero lejos de abandonar, una vez más, a base de trabajo ha conseguido enamorarle.

Hoy escribo sobre Carlos Suárez cuando lleva poco más de dos meses en el Real Madrid pero tengo la esperanza de poder volver a escribir sobre él después de celebrar un título, los dos con lágrimas en los ojos por haber logrado un sueño.

PD: Acabo de llegar del Real Madrid-Brose Basket. Carlos Suárez: 26 minutos, 7 puntos, 9 rebotes, 3 asistencias, 6 faltas recibidas para 26 de valoración. No me gustan los números pero es que hoy estoy FLI-PAN-DO.