Velocidad de crucero
La mejor defensa contra el mejor ataque. Aparente duelo de estilos en la décima jornada de la Liga Endesa, entre dos conjuntos acomodados en la zona noble de la tabla. La fatiga del anfitrión, tras su exigente partido del viernes en Euroliga, a examen.
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Velocidad de crucero
Juan Luis Barbero
3.diciembre.2012
Llull agradece el telegrama al Chacho, tras castigar el aro maño. Fuente de foto: deportes.elpais.com
El Real Madrid de Pablo Laso viene haciendo cotidiano lo extraordinario. 10 victorias consecutivas, rozando los 90 puntos de promedio en ataque con un juego basado en su fortaleza perimetral. En la mañana del pasado domingo visitaba el Palacio un CAI Zaragoza orgulloso de su defensa, para plantar cara a la maquinaria merengue.
El partido presentaba además el atractivo de volver a ver a Rafa Hettsheimeir, al que Laso pretende introducir poco a poco en el engranaje del equipo. Complicada tarea para el brasileño, desde el quinteto inicial, la de frenar a un inspirado Norel. No era el mejor día para que el nuevo center llenara las alforjas de confianza, pero su importancia en el futuro del equipo se antoja muy alta.
Tanto se había fijado el foco sobre la defensa maña que se olvidó algo evidente si se repasa el roster del profesor Abós: el CAI tiene gente con bastante talento en ataque, cosa que quedaría meridianamente clara en el espectacular primer cuarto. El 26-26 al final de ese primer parcial (pese al empuje de Carroll) arrojaba una reflexión: los zaragozanos venían a competir, con todas las armas a su alcance.
Y eso haría el conjunto maño. Tras sufrir en el segundo parcial ante el rodillo madridista, un genial Van Rossom (con la ayuda de Norel y las valientes penetraciones de Stefansson) volvería a igualar el partido, ante la desesperación de Pablo Laso (con bronca a Mirotic incluida, provocada por la pasividad del genio balcánico atrás). Pero sería la ilimitada calidad del perímetro madridista la que desnivelaría la batalla, sobre todo en el rato reservado al inquilino que más vive de la improvisación. Abós había preparado a su tropa para confrontar cualquier amenaza tangible, pero no hay plan que pueda contrarrestar la magia en estado puro…
El Chacho saltó a la pista para cambiar el ritmo de su equipo y del partido, y a buena fe que lo logró. Sus asistencias para los vuelos de Sergio Llull y Rudy Fernández inflamaron al Madrid y a la gente del Palacio, además de minar la moral de la tropa rival. La inspiración de Sergio, completada con el arreón final de Rudy y Carroll (15 y 18 puntos finales respectivamente), acabaron por derrotar a un dignísimo CAI, que sale del Palacio con su defensa dinamitada pero con el orgullo intacto. 94-79 el resultado final, con doble-doble incluido de Norel, el gigante pulido en la factoriá de la Penya (20 puntos, 10 rebotes).
El Real Madrid continúa invicto y al frente de la clasificación de la Liga Endesa, mientras el CAI se aferra a su puesto de playoffs, empatado a 6 victorias con el noveno Unicaja.
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