Pau Gasol: límites en continua reinvención

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Pau Gasol acaba de sumar su segundo anillo. El séptimo y decisivo partido de las finales que dio el título a los Lakers fue un monumento al desacierto. El pívot angelino no fue ajeno a la tendencia. Es difícil estar sereno y ser preciso cuando te estás jugando un rincón en la posteridad. No obstante, Pau terminó con 19 puntos y 18 rebotes, con algunos minutos memorables en el cuarto decisivo. Una vez más, el español le pegó un corte de mangas a la opinión generalizada (la mayoría de los expertos coincidían en el apunte de que se le veía muy cansado en estas finales). No es la primera vez que Pau convierte en miopes las previsiones sobre su juego. En este artículo te damos cinco motivos para considerar al gigante de Sant Boi una leyenda viviente.

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Pau Gasol: límites en continua reinvención

Pedro Fernaud

 

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Pau Gasol ya tiene 2 anillos para engalanar sus dedos y presumir de ganador. 

Fuente foto: nba.com

 

1-Pau ACB: breve pero inolvidable. Quién no recuerda aquel año 2001. Fueron seis meses mal contados en los que Pau pasó de ser un cachorro prometedor pero no demasiado utilizado a una estrella en el firmamento europeo. Para la memoria, su forma de moverse en el parqué, jugando como 3 y a veces también como 4. Tenía mucha altura, pero casi impresionaba más la irreverencia de su carácter o lo extraordinariamente que estaba coordinado para su talla. El Madrid de Djorjevic, Herreros y Scariolo fueron sus primeras víctimas. Pau las anotaba de todos los colores y la pujanza de su juego imantó el interés de varias franquicias NBA, que le invitaron a que se apuntara al Draft. Una frase de su entrenador en las filas bralugranas resume su inteligencia. Aito García Reneses decía: “Pau lo capta todo a la primera, con otros jugadores tienes que estar tres o cuatro veces insistiendo sobre lo mismo”.

 

2-Transformación física. Paso de ser Shaggy (de Scooby Doo) a Lobezno versión XXL. Alto, desgarbado, lampiño y peinado para hacer la primera comunión, con la raya a un lado. Así fue la primera versión de Pau. Con esa pinta era el sexto hombre de aquel equipo que conquistó el mundial junior de 1999, en el que JC Navarro era la megaestrella. Aquel chico dejaba algunos destellos de clase, pero parecía imposible rellenar con más carne o músculo aquellos huesos más propios de un diplodocus que de un atleta. Poco a poco empezó a cambiar su fisonomía.

 

En su último año en la ACB ya presentaba un aspecto más fibrado. Delgado, pero con una cierta potencia. Su verdadera transformación física llegó con su paso a la NBA. En el verano de 2001 se machacó a dolor en gimnasio, tutelado por su preparador físico personal, Pepe Casal. Casal habla de Pau “como un portento físico”. Hasta el punto de que, de los jugadores que ha guiado, comenta que sólo un tal Fernando Martín puede compararse con él en cuanto a la potencia del tren superior.

 

Sea como fuere, el Pau de la actualidad es una suerte de Lobezno gigante. El pelo largo y desmadejado y la barba desafiante le confieren un aspecto fiero, ideal para competir en la ultracompetitiva jungla NBA. Acompañando ese cambio, luce un cuerpo mucho más musculado, donde gracias a diversos trabajos específicos y progresivos, ha encontrado un equilibrio entre el tren superior e inferior, lo que le ha ayudado a tener muchas menos lesiones en los últimos tiempos. En palabras de un taxista manresano, Pau ha dejado que emerja en él “el Hulk blanquito que llevaba dentro”.

 

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Pau llevó a los Grizzlies a los play offs y obtuvó allí su primera

designación como All-Star. Fuente foto: nba.com

 

3-El pionero en la excelencia NBA. Dice Rafa Nadal que el deportista español que más admira es Pau Gasol porque ser el pionero en un deporte es siempre mucho más complicado. Leva razón a medias. Pau es pionero en cuanto a que es el primer jugador español que es actor protagonista en la mejor liga del planeta. Estrella, incluso. Pero antes que él hubo un tal Fernando Martín que se dejó las agallas (y unos cuantos miedos) en una aventura entonces impensada, también impensable: jugar con los profesionales NBA, entrar en un olimpo entonces vedado a las estrellas FIBA (Martín tuvo que dejar de jugar con la selección española).

 

El jugador del Estudiantes y el Madrid pulverizó los límites unas cuantas veces en su carrera. Gasol lleva haciéndolo toda su vida deportiva. En su primera temporada con los Memphis Grizzlies, el equipo que lo escogió en la tercera posición del draft, fue designado como mejor novato del año. Desde el principio, lideró a la franquicia de la tierra de Elvis. Luego llevaría al equipo a los play-off. Logro que le valió la condición de All Star, pero ya en esas rondas finales ni él ni su equipo tuvieron mucha fortuna, lo que le valió los reproches del entonces máximo dirigente de su equipo y hombre que presta su imagen al logo de la liga, Jerry West. Pau apretó los dientes. Estaba estancado.

 

4-Líder de la selección española. También su galvanizador. En torno a su juego mayestático, la selección ha dado un salto de calidad único en su historia. Nuestro combinado ha pasado a ser un equipo de medallas, con un óptico aprovechamiento de sus recursos, a ser un equipo dominante a la manera en la que hace no tanto lo eran las extintas Unión Soviética y Yugoslavia. Con Pau al frente, España ha sido campeona del mundo, de Europa y también subcampeona olímpica. Adivina adivinaza, ¿cuándo pensáis que el señor Gasol volverá a enfundarse la roja?

 

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Pau ha guiado a la selección al campeonato del mundo y de Europa.

Fuente foto: Fed. Española de Baloncesto. 

 

5-Megaestrella de la NBA. El presidente de EEUU, Barack Obama, no tiene mucho tiempo. No ve casi la televisión. Cuando lo hace, adora ver partidos de baloncesto. Él que llegó a jugar de base en la Universidad de Hawai. El señor Obama tiene una opinión consolidada en cuanto a los pivots de la NBA: “Para mi gusto, el mejor pívot de la liga ahora mismo es Pau Gasol. ¿Has visto como pasa? ¿La inteligencia con la que compite? Es increíble lo rápido que mueve los pies”. Alucinante. El tipo más poderoso del planeta piensa que los técnicos y periodistas de la NBA no están muy lúcidos. Opina que el puesto de pívot en el mejor quinteto de la liga, ocupado por Dwight Howard los dos últimos cursos, debería ser para Pau.

 

Una opinión así da una buena idea de la trascendencia que ha adquirido el juego del mayor de los Gasol en las tres últimas temporadas, donde, de manera consecutiva, ha estado en las finales del campeonato con los Lakers. Asociando su juego con la marca del equipo que más vende de la NBA, Gasol ha logrado un impacto mediático colosal. También ha sido espectacular la progresión de su juego.

 

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Fuente foto: nba.com

  

Ya ha sido tres veces All-Star. Ha ganado dos anillos. Y se ha quitado la pegatina de blando que le pusieron en las finales del 2008, para ponerse una que dice estrella determinante de la NBA. Un tipo sólido en defensa (ahora es un carpanta de los rebotes) e imaginativo en ataque (uno de los mejores pasadores que se recuerdan en el poste bajo). “El hombre gracias al cual nuestro equipo ha vuelto a la senda de los títulos”, en palabras del mítico ‘Magic’ Jhonson. Con estas coordenadas, es fácil entender por qué este versátil de 215 centímetros figura ahora en el top ten de los jugadores mejor pagados de la liga. Enhorabuena, Pau.