Mirza Teletovic: sueños de NBA, pies en progresión, triplista letal

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Algunos partidos hablan de la capacidad de un jugador, más allá de que no sean un prodigio de regularidad de su parte. En esa línea se inscribe la actuación de Mirza Teletovic (Mostar, 1985) en la jornada 3 de la ACB. El ala pívot montenegrino fue capital en la victoria de su equipo sobre el Gran Canaria (82-61). Sin embargo, como sucedió en la jornada anterior con su predecesor en la distinción, Esteban Batista, el panorama no era muy alentador al descanso. Mirza sólo había podido sumar 4 puntos en el primer periodo. Pero todo cambió al final del encuentro, para totalizar 27 puntos de valoración, coronados con 25 puntos. En la segunda mitad Mirza se olvidó de fallar y embocó los 5 triples que probó (0 de 4 en la misma suerte durante la primera mitad). Son los números de un hombre que anhela jugar en la NBA, pero que este año prorrogó su relación con el Caja Laboral hasta el 2014. Un tipo en progresión que cada curso confiere más matices de su juego, conforme crece su rol protagónico en el Caja Laboral.

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Mirza Teletovic: sueños de NBA, pies en progresión, triplista letal

Pedro Fernaud

19.octubre.2010

 

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Levantar nuevos trofeos individuales y colectivos es el objetivo de ‘Tele’ para esta temporada.

De momento, ya ha jalonado su carrera con la consecución de 2 ligas, una Copa del Rey 

 (donde logró la distinción de MVP que recibe del presidente de la ACB, Eduardo Portela, en

esta foto) y tres Supercopas con el equipo baskonista. Fuente de foto: acb.com.

 

No contento con el partidazo que se había marcado ante los insulares, Teletovic también partió la pana ante los Memphis Grizzlies. Así hasta sumar 24 puntos, 9 rebotes y 3 asistencias y liderar un partido muy digno de los baskonistas, que se quedaron a sólo 5 puntos de los osos de Memphis (110-105). Tampoco se arrugó en el segundo partido de la gira americana, ante los poderosos Spurs, con 18 puntos que no fueron suficientes para recortar las importantes distancias entre ambos equipos (108-85 a favor de los tejanos). Esas actuaciones pues han funcionado como indicador de su momento dulce de forma y exponentes del potencial del pívot montengrino, que nunca ha ocultado su deseo de jugar algún día en la mejor competición del planeta.


Eso sí, Teletovic tiene claro que de momento su sitio está en el Caja Laboral. Y no sólo por lo que dice su contrato, que firmó la pasada primavera y cuya duración se prolonga hasta el 2014. ‘Tele’ tiene claro que “no soy la clase de jugador que lleve bien calentar el banquillo y no disponer de apenas oportunidades. Nunca dudé que pudiera jugar en la NBA, pero hay que saber medir los tiempos y antes tengo que seguir mejorando facetas de mi juego. Y el mejor sitio para hacerlo es Vitoria”.


Honestidad y lucidez, dos cualidades no tan habituales en los jugadores de primera categoría. Pero que este hombre gasta la exigencia de los que se están abriendo paso en la jungla competitiva del mejor baloncesto europeo. Por de pronto, la pasada temporada su juego ya evolucionó para incluir más recursos en su gama competitiva. Tiros de cinco metros, más juego de espaldas y fintas de tiro más frecuentes para emprender el camino a canasta con la ventaja que da el poder disuasorio de su tiro triple, que sigue siendo la característica más sobresaliente de su juego.


Por cierto, tampoco tiene problemas de ego el chico. “El año pasado estuve viendo la Eurocup con mi agente y me dijo que el único jugador ACB que ya tiraba sus triples desde los 6’75 actuales era yo. Así que la adaptación a la nueva distancia no está siendo ningún problema para mí”. Esa autoestima le vendrá de perlas para ocupar el enorme vacío que ha dejado la marcha de Tiago Splitter en la paleta de recursos ofensivos del equipo baskonista. A tenor de sus primeras actuaciones esta temporada, el chico parece capacitado (y enchufado) para cubrir esa vacío de poder.


En sus manos y en las de Fernando San Emeterio está el grueso de la suerte de esta temporada del mejor equipo (exclusivamente de baloncesto) de nuestro país. Suerte, gudaris.