Fiebrefusion 01

Durante cuatro años (1986-1990), Alf se metió placidamente en los hogares de medio mundo. Este extraterrestre se granjeó las simpatías de la gente por su, lo sé suena raro, humanidad. Espontáneo y divertido, su estrafalaria sabiduría de antropólogo alienígena generaba admiración y carcajadas a partes iguales. Sus problemas de adaptación para vivir con una familia de clase media yankee también tenían su miga. 

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Ringo Star y Alf, una pareja con sede en la costa este de la ACB

 

Sea como fuere, este viajante estelar con pinta de animal doméstico se ha ganado un puesto en el imaginario pop de un par de generaciones. Su  cuerpo está cubierto de pelaje anaranjado. Asimismo, tiene un hocico lleno de curvas, lunares faciales, ocho estómagos y le gusta comer gatos. Su afición a engullir felinos pues es otra de las fuentes de surrealismo y diversión de la saga. Un personaje, en suma. al que es imposible no coger cariño. 

La historia de Ringo Star no tiene prácticamente nada que ver con la de Gordon ALF Shumway, verdadero nombre de la criatura que nos ha ocupado hasta ahora. Ringo fue quizá el componente menos talentoso de los Beatles, pero al tiempo uno de los más queridos, sino el que más. Su simpatía natural le granjeó el favor del público y, por qué no decirlo, montañas de éxitos con las mujeres. 

Ringo se llama (todavía vive, es generación del 40, Liverpool) en realidad Richard Henry Parkin Starkey Jr. Se granjeó su fama como batería de los célebres escarabajos, pero luego demostró que es un músico más que decente, demostrando sólidas maneras como cantante y compositor, incluyendo también diversos trabajos en el terreno de la interpretación. 

La explicación de su apodo no tiene desperdicio: “Lo elegí porque es nombre de perro y los perros me agradan”. Otro personaje, pues. Criado en el seno de una familia trabajadora, el señor Star fue el último miembro de la mítica banda de Liverpool en incorporarse al cuarteto. En la madurez le han llovido reconocimientos por su trabajo, como por ejemplo la Orden del Imperio Británico. Entre otros piropos, la revista Time lo definió como “uno de los impulsores clave del cambio en la música popular que supusieron los Beatles”. 

Dicho todo esto, surge la inevitable pregunta, ¿qué diantres tienen en común un extraterrestre políticamente incorrecto y un popero al que la vida no se ha cansado de decirle sí? No tienes más que clicar aquí y quedarte de asombro, al parecer estos dos seres frecuentan la excelencia en la liga ACB…