Air ball !

blogs-icononba-icono

Algunas jugadas definen una competición y la temperatura emocional (e intelectual) de sus protagonistas. Alejandro Echeverría traza un divertido relato, lleno de suspense y entretenimiento, para explicar cómo se gestó la canasta ganadora de Ron Artest. Dos puntos canjeables por la tercera victoria del equipo angelino, que de ese modo ha cobrado ventaja en la apasionante eliminatoria que le está enfrentando a los Phoenix Suns. Aparte de didáctica, su crónica está enriquecida por imágenes y vídeo, con lo que podrás conocer cada secuencia de una de esas acciones del juego que marcan el destino de una competición.

***

Air ball !

Alejandro Echeverría Rey

 

Hay maneras y maneras de ganar un partido. Hacerlo con un «balón al aire» (‘air ball’) es vergonzoso pero vale lo mismo. De esa forma ganaron anoche los Lakers el quinto partido dejando la serie en 3-2 a su favor.

 

Al ver la jugada final en directo algunos pensamos en lo rápido que es Kobe para recibir el balón,  lo buena que es la defensa de los Suns al no dejarle tirar cómodo y lo atento que estaba Artest que podría incluso haber finalizado con un «alley-oop». Sin embargo, al volver a ver el video con calma más de uno hemos cambiado de opinión y nos vienen algunas preguntas a la mente.  Pero pongámonos primero en situación para ubicar la jugada.



Después de un partido bastante irregular el omnipresente Nash deja el marcador 101-98 a 1:45 para el final. Todavía hay tiempo para que pase cualquier cosa, pero el último minuto se convierte en una alocada ristra de tiros fallidos por ambas partes (2 tiros de campo y un triple por parte de los Lakers y 1 triple de los Suns) hasta que a 18 segundos del final los Suns disponen de tres tiros desde el triple poniendo de manifiesto (por mucho que se diga lo contrario) la mala defensa de los Lakers.

A sólo 3,5 segundos del final Richardson anota el tercero de ellos a tablero, levantando de sus asientos a sus compañeros de banquillo y a todo el estado de Arizona (y ruborizando a más de un espectador madrugador). Tres segundos y medio son más que suficiente para realizar cualquier jugada de dos y hasta tres pases rápidos.

 

Pincha en la imagen para ampliarla

Los Lakers deciden situarse en el campo como sigue. Odom para sacar (defendido muy flotante por Hill), Artest y Fisher fuera del triple (defendidos por Richardson y Nash respectivamente), en el centro Gasol (con Frye) y debajo del aro Kobe (defendido por Dudley).

Ahí vienen las primeras preguntas:
¿Por qué Richardson y Nash no defienden el pase a Artest y Fisher?
¿Por qué le masajea Frye los riñones a Pau?
¿Qué hace Dudley defendiendo a Kobe?


La primera pregunta puedo intentar responderla tirando de manual. Ambos están obstaculizando el movimiento de sus defensores hacia la zona. Saben que cortarán para bloquear a Kobe y que aunque Artest reciba el balón, no tirará de tres (sólo un minuto antes Artest se había tirado un espléndido triple ganando de 2 con 20 segundos de posesión en el reloj y todo su público gritando: ¡NOOOOOOO!).


La segunda pregunta puede ser interesante. Si Frye no defiende por delante o tres cuartos a Gasol puede ser bien por la rapidez de Pau para pedir un pase atrás o simplemente porque Gentry les habrá taladrado en el tiempo muerto a los cinco que todos los balones irán a Kobe. De ahí esa postura tensa con los ojos vueltos hacia atrás a la espera del primer movimiento de la estrella.


Sobre la tercera pregunta, nunca lo sabremos realmente. Lo que si vemos es a un Dudley que prefiere ponerse detrás para verlo todo mejor (sólo le faltan los Gustosines en la mano) en vez de defender el pase o adelantarse de alguna forma a sus movimientos.

 

Pincha en la imagen para ampliarla

Artest rodea el triple y Fisher corta por la zona alegremente gracias al bloqueo de Kobe a Dudley. Mientras tanto, Gasol y Frye se agarran el cinturón mutuamente protagonizando un combate de sumo en la línea de tiros libres. Hill deja de cubrir el saque y se da la vuelta para ver que está pasando (buscando a Kobe, por supuesto), por lo que Odom se relaja para buscar el mejor pase de todos los posibles.

 

Pincha en la imagen para ampliarla

Fisher termina el corte hasta el lateral del triple (seguido por Nash) y pide el balón, aunque en realidad todos sabemos que únicamente ha abierto hueco para Kobe. Artest se aleja al otro extremo por la misma razón y se acomoda allí para pasar desapercibido y ver quién gana el partido.


Kobe pasa al lado de Gasol, que sigue abrazado a Frye, dejando atrás a su defensor (Dudley) que se une al abrazo (nadie sabe muy bien por qué). Hill espera a Kobe con los brazos abiertos como el que intenta atrapar a un espontáneo desnudo en un campo de fútbol. Ojo al grandísimo espacio que queda para el pase interior a Kobe.

 

Pincha en la imagen para ampliarla

En vez de pedir el balón en el interior, Kobe decide buscar la opción más difícil acercándose al triple plagado de contrarios. Artest y Fisher siguen en las esquinas del triple disfrutando del partido mientras Gasol empieza a formar un sólo cuerpo con Frye de tanto roce.


Odom, bien programado en el tiempo muerto, sólo tiene una idea en mente: «balones a Kobe, balones a Koooooobe» por lo que se olvida completamente de meter un pase interior a Pau que tenía toda la posición ganada como para superar fácilmente a Frye. Mientras tanto, un jugador no identificado se encuentra en la frontal de la zona a más de 3 metros de su atacante y con cara de conducir un tractor en dirección contraria.

 

Pincha en la imagen para ampliarla

Después del telegrafiado pase a Kobe, Nash acude a la ayuda junto a Hill (en realidad no necesitan dar más de dos pasos). Podría haber sido un 3 contra 1, pero Dudley sigue dudando si acercarse a la acción o ir directamente al rebote. A los lados de Kobe quedan dos jugadores libres (Fisher y Odom) a los que podría haber doblado el pase con tiempo suficiente para un tiro cómodo.


También estaba todavía a tiempo de meter el balón interior a Pau que llevaba un buen rato aguantando a Frye y hubiera podido seguir aguantando un rato más. ¿Habrá sido Dudley el que ha evitado ese pase interior por estar en ese momento por allí cerca?
En cualquier caso, tratándose de la NBA, pocos jugadores salen al campo sin burreras a falta de unos segundos. Así que, ocurrió lo que tenía que ocurrir: tiro a toda costa de Kobe, incluso quedando más de dos segundos.

 

Pincha en la imagen para ampliarla

Cuando el balón está todavía en el aire, Pau gana por completo la posición de rebote a Frye. Fisher y Artest entran desde el triple. Odom saca los Gustosines y se relaja. Hill y nuestro héroe, Dudley, se acercan al aro a ver qué pasa. Todos esperando la canasta milagrosa o el rebote saltarín a una distancia prudencial.

 

Pincha en la imagen para ampliarla

Contra todo pronóstico, el tiro forzado de Kobe se convierte en un memorable balón al aire («air ball») que desemboca en las manos de Artest (gracias a que en vez de esperar el rebote como indica el manual sigue cortando por la zona al no poder reducir la velocidad lo suficiente) con tiempo de sobra para volver a tirar casi sin oposición (aunque el tiro pareciese forzado).



Dudley, a pesar de medir exactamente lo mismo que Artest (2.01), decide desconcentrarle tocándole los riñones (de moda en la defensa de los Suns) en vez de intentar el tapón o simplemente puntear el tiro.


¿Resultado? Partido y 3-2 para los Lakers. Artest no se lo cree, no sabe si festejarlo o no.
Ahora viene lo bueno. Para guinda, las declaraciones de Dudley: «Queríamos hacer una buena defensa a Kobe en la jugada final e hicimos una buena defensa a Kobe en la jugada final».


Amén.